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Evangelio del día – Lectio Divina Mateo 5, 33-37

Lectio Divina por Matías Leiva de Argentina 🇦🇷

👼🏻 Invocamos al Espíritu Santo

¡Ven, Espíritu Santo!
Ilumina nuestra mente y nuestro corazón.
¡Ven, Espíritu Santo!
Haz de nosotros tierra fértil, para que la Palabra de Dios
produzca frutos abundantes.
¡Ven, Espíritu Santo!
Danos sabiduría para comprender tu Palabra,
Alegría para compartirla y amor para ponerla en práctica.
Amén.

📖 Evangelio según San Mateo 5, 33-37

También han escuchado que se dijo a los antepasados: “No rompas tu promesa, sino cumple lo que le juraste al Señor”. Pero yo les digo que no juren de ningún modo, ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es la plataforma donde descansan sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey; tampoco jures por tu cabeza, porque no puedes hacer que un mechón de tu cabello se vuelva blanco o negro. Cuando digan “sí” que sea “sí”, y el “no”, sea “no”, porque cualquier otra cosa que digan proviene del maligno.
😇Palabra del Señor.

📕 Lectura. ¿Qué dice el texto?

Vuelve a leer detenidamente el texto:
† ¿Cuáles son aquellas frases o palabras que quedan resonando en tu corazón?
† ¿Qué sucede en el texto?
† ¿Cuál es la propuesta de Jesús?

El Evangelio de hoy, Jesús nos presenta en el Sermón de la Montaña su postura frente a la Ley. Utilizando la famosa antítesis de Mateo: “Ustedes han escuchado… pero yo les digo…”, Jesús habla con una autoridad que está por encima de la legislación antigua, no para abolirla sino para resignificarla y darle cumplimiento en plenitud.
Al hacer mención del juramento, Jesús nos ubica frente a la raíz de la Ley y los mandamientos: el servicio a la vida, la justicia, el amor y la verdad. Es por eso que su mensaje es radical y sin precedentes: Cuando digan “sí” que sea “sí”, y el “no”, sea “no”.

📗 Meditación. ¿Qué nos dice Dios en el texto?

Una vez más, Jesús nos interpela con su Palabra: ¿Somos personas auténticas, de palabra, amantes de la verdad?
Aquél que necesita “jurar” para dar credibilidad a su palabra, y mucho más, poner a Dios como testigo de su juramento, nos invita a pensar no sólo en la inseguridad y poca credibilidad de lo que dice, sino también en la doble cara con la que muchas veces vive.
Si hacemos lo que decimos, no necesitamos de juramentos. Nuestro testimonio de vida cristiana no se construye “a media verdad”, ocultando situaciones para agradar, matizando la realidad para hacerla ver más “bonita” o incluso callando lo que debo decir. Las personas de palabras son transparentes, sencillas y basta que digan “sí” o “no” para que así suceda.

🙋🏻 Siguiendo el mensaje de este texto, ¿Cuál es tu meditación, tu reflexión personal?
¿Cuál es la invitación que te hace el Señor con su Palabra?

📘 Oración, ¿Qué le decimos a Dios?

Señor Jesús, también hoy nosotros queremos pedirte que nos ayudes a ser honestos: con nosotros mismos, con los hermanos y contigo. Que sea sí cuando digamos “sí”, para ser hombres y mujeres transparentes al servicio de tu Palabra.
Amén

🙋🏿 Siguiendo el mensaje de este texto, ¿Cuál es tu oración personal?

Amén.

📙 Contemplación. ¿Cómo interiorizamos la Palabra de Dios?

Cuando digan “sí” que sea “sí”, y el “no”, sea “no”. (Repetimos)

🙋🏼 Siguiendo el mensaje de este texto, ¿Cuál es la palabra o frase o párrafo o actitud que te ayuda a recordar este texto?

🏃🏻⛪ Acción, ¿A qué me comprometo con Dios?

Cada día, nos encontramos con muchas personas, en las que, por diferentes situaciones, matizamos la verdad y ocultamos lo que debemos decir. Nos propondremos hoy ser transparentes con nuestras palabras, sinceros y sin doblez. Y si durante estos últimos días, para agradar, has dicho una “mentira piadosa” o faltaste a la verdad, el Evangelio hoy te invita a corregirlo.

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