Evangelio del día – Lectio Divina San Mateo 1, 1-16, 18-23

Lectio Divina
José Carlos Rivera de Honduras 🇭🇳

Invocación al Espíritu Santo.
Ven Espíritu Santo, Espíritu Divino, ven a iluminar nuestra mente, nuestro corazón, ven dulce huésped del alma, infunde ese fuego que reconforta y fortalece nuestra fe, abre mi mente y mi corazón para comprender y poner en práctica en mi vida, el mensaje que hoy me regalas Padre Santo.
Amén.

Lectura del santo Evangelio según san Mateo 1, 18-23.
El origen de Jesucristo fue este: María, su madre, estaba comprometida para casarse con José; pero antes que vivieran juntos, se encontró encinta por el poder del Espíritu Santo. José, su marido, que era un hombre justo y no quería denunciar públicamente a María, decidió separarse de ella en secreto. Ya había pensado hacerlo así, cuando un àngel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, descendiente de David, no tengas miedo de tomar a María por esposa, porque su hijo lo ha concebido por el poder del Espíritu Santo. María tendrá un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. Se llamará así porque salvará a su pueblo de sus pecados».
Todo esto sucedió para que se cumpliera lo que el señor había dicho por medio del profeta: «La virgen quedará encinta y tendrá un hijo, al que podrán por nombre Emanuel» (que significa: «Dios con nosotros»).
Cuando José despertó del sueño, hizo lo que el ángel del Señor le había mandado, y tomó a María por esposa.
Y sin haber tenido relaciones conyugales, ella dio a luz a su hijo, al que José puso por nombre Jesús.
Palabra del Señor

1. ¿Qué dice el Texto?
En la lectura del Evangelio que se nos presenta hoy, se nos muestra la manera de cómo Jesús vino a este mundo, la situación afectiva y sentimental que José y María tenían en ese momento, las actitudes que José tomó al darse cuenta que María, que era su prometida, estaba embarazada, las situaciones de dudas que pudieron presentarle a José en ese momento; pero todo era parte del plan divino de Dios, él ya tenía su promesa hacia María, por eso un ángel se le presenta a José para mostrarle el plan y propósito divino que Dios tiene para la vida de él y de María, les dice que no tengan miedo, porque ellos serán los padres de Jesús, el salvador de nuestros pecados.

2. Meditación.
Para hacer una mejor reflexión quiero dejarte estas preguntas, para que las puedas meditarlas y reflexionar en tu interior:
●¿Reconozco a Jesús como el Salvador del mundo, que vino a redimirme de mis pecados?
●¿Tengo claro en mi vida, el propósito divino, que Dios tiene preparado para mí?
●En los momentos de dificultad o situaciones de duda que se me presentan en mi vida, al igual que José, ¿Actuó con fe y confianza en Dios, controlando y dominando mis impulsos y emisiones, o exploto, dejándome llevar por la ira y enojo del momento?.
●¿Se me dificulta el poder reconocer las señales o voz de Dios, cuando me habla para guiarme en su plan divino?

3. Oración.
Padre Celestial, gracias por un día más de vida que me regalas, por las bendiciones recibidas en mi vida y que muchas veces no sé reconocerlas. Padre ayúdame en mi caminar, ayúdame al igual que José poder reconocer tu voz, y tener claridad en las desiciones de mi vida y el plan que tienes destinado para mi, sobre todo Padre; ayúdame a reconocer que tú entregaste a tu Hijo, para que me salvará de mis pecados, enséñame a ser agradecido.
Amén.

Haz tu oración personal, hablando con el Padre.

4. Contemplación.
«Cuando José despertó del sueño, hizo lo que el ángel del Señor la había mandado, y tomó María por esposa».

Elige la frase o palabra que más haya llamado tu atención, repítela varias veces, y resuene en tu interior.

5. Acción
Después de haber leído, meditado y orado, la lectura de hoy, establece un compromiso tuyo, hacía Dios, algo que sea específico y puedas cumplirlo, en los siguientes días.

Acerca de Cristonaut@s FRP

Ver tambíen

Evangelio del día – Lectio Divina Marcos 3, 20-21

Lectio Diviniemos Sábado 20 de Enero de 2024 Sábado II Semana Tiempo Ordinario Jorge Ortiz …

Deja una respuesta

× WhatsApp / Cristonautas - Clic aquí