Evangelio del día – Lectio Divina Lucas 7, 36-50

Lectio divina
Jueves 19 de septiembre 2024
Jueves XXIV Semana Tiempo Ordinario
Leydy Johana Leon Gonzalez de Colombia ✍🏻🇨🇴

🤲Invocación del espíritu santo🕊️

Espíritu santo tu que eres luz y guía ilumina cada uno de mis sentidos para llevar a mis hermanos tu palabra con amor y alegría permitiendo que cada uno de nosotros nos alim³entemos de tu palabra amen.

Evangelio según San Lucas 7, 36-50

36 Uno de los fariseos invitó a Jesús a que comiera con él. Jesús fue a su casa y se sentó a la mesa. 37 En el momento que una mujer pecadora, de mala reputación, se enteró que Jesús estaba cenando en la casa del fariseo, tomó una frasco hecho de alabastro, lleno de perfume, 38 y estando detrás de Jesús, junto a sus pies, llorando, comenzó a mojar sus pies con sus lágrimas y se los secaba con sus propios cabellos. Ella besaba los pies de Jesús y derramaba el perfume sobre ellos. 39 Cuando el fariseo que lo había invitado a comer, vio esto, pensó: “Si este hombre fuera un profeta, sabría quién es esta mujer que lo está tocando porque es una pecadora”.

40 Jesús, respondiéndole, le dijo: “Simón, tengo algo que decirte”

Respondió Simón: “Di, Maestro”.

41 Jesús dijo:

“Dos hombres estaban en deuda con un hombre que solía prestar dinero. Uno le debía quinientas monedas de plata y el otro debía cincuenta, 42 pero ninguno de ellos podía pagarle; así que perdonó la deuda de ambos. Entonces ¿Cuál de ellos lo amará más?

43 Respondió Simón: “¡Pienso que aquel a quien más se le perdonó!”

Jesús le dijo: “Haz juzgado rectamente”.

44 Luego, volviéndose hacia la mujer, le dijo a Simón:

“¿Estás viendo a esta mujer? Cuando entré, no me ofreciste agua para lavarme los pies, pero ella me los lavó con las lágrimas y los secó con sus cabellos. 45 No me diste un beso de saludo, pero ella no ha dejado de besarme los pies desde que entré. 46 No pusiste aceite en mi cabeza, pero ella ha derramado perfume mis pies. 47 Por esto te digo que sus muchos pecados ya han sido perdonados porque mucho ha amado. Pero a quien se le perdona poco, es porque poco ama”.

48 Entonces Jesús dijo a la mujer: “Tus pecados te son perdonados”.

49 Los que estaban sentados a la mesa con Él comenzaron a decir entre sí: “¿Quién es éste que incluso perdona los pecados?”.

50 Pero Jesús le dijo a la mujer: “Tu fe te ha salvado. Vete en paz”

Palabra del señor

Lectura ¿qué dice el texto?

El evangelio de hoy nos habla de la visita de Jesús a la casa de un fariseo en la cual entró y se sentó a la mesa. Entonces una mujer pecadora que vivía en la ciudad al enterarse que Jesús estaba allí se presentó con un frasco de perfume y colocándose detrás de él se puso a llorar a sus pies bajándolo con sus lágrimas y sacándolo con sus cabellos los cubría de besos y los ungía con perfume. Al ver esto el fariseo que había invitado a Jesús a su casa pensó si este fuera profeta sabría quién es esta mujer una pecadora. Pero Jesús dijo a Simón tengo algo que decirte Simón respondió dime maestro y Jesús le dice si un prestamista tenía dos deudores uno debía quinientos denarios y el otro cincuenta y como no tenían como pagar el les perdona la deuda cuál de los dos amará más al prestamista. Simón contesto pienso que aquel a quien le perdonaron más. Jesús le dijo has juzgado bien. Y volviendo hacia la mujer le dice a Simón ves a esta mujer entre en tu casa y no me derramarse agua sobre los pies en cambio ella los baño con sus lágrimas y los secó con sus cabellos. Ru no me besaste en cambio ella desde que entró no cesó de besarme los pies. Tú me ungiste mi cabeza ella derramó perfume sobre mis pies. Por eso digo sus números pecados han sido perdonados porque ha demostrado mucho amor. Pero a quien se le perdona poco demuestra poco amor y después dijo a la mujer tus pecados te son perdonados. Los invitados pensaban quien es este que perdona los pecados. Pero Jesús dijo a la mujer tu fe te ha salvado vete en paz.

Meditación, ¿que nos dice Dios en el texto?

Jesús a través del evangelio nos dice que no importa que tan grande sean nuestros pecados el solo nos pide un arrepentimiento sincero desde un corazón que este en la apertura de un cambió al amor desde la fe sin juzgarnos internamente ya que la mayoría de las veces somos nosotros mismos quienes nos encerramos en nuestros dolores y no permitimos que el sea el que sane nuestro corazón por medio de su gracia y de su paz. Estamos llamados amarlo y dejarnos amar por el a través del perdón.

Oración

Señor permíteme perdonar y perdonarme para amarte y servirte con alegría.

Contemplación

Después dijo a la mujer » tus pecados te son perdonados» recordemos al que más perdona más ama.

Acción

Abrir mi corazón a perdonarme para si amarme y amar a los demás.

Acerca de Ramón Pané

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