Lectio divina
Sábado 23 de Agosto del 2025
XX semana del tiempo ordinario
Ana Lorena Peña Dominicana ✍🏻🇩🇴
1. Invocación al Espíritu Santo
Ven, Espíritu Santo,
Abre mis oídos para escuchar la planta de Dios,
abre mi mente para comprenderla,
y abre mi corazón para vivirla y llevarla a la práctica.
Amén
Lectura Evangelio según San Mateo 23, 1-12
Entonces Jesús le habló a la gente y a sus discípulos, 2 diciéndoles lo siguiente: “Los maestros de la ley y los fariseos tienen la autoridad de interpretar la Ley de Moisés. 3 Por tanto, todo lo que ellos les digan, obsérvenlo y háganlo; pero no imiten sus acciones, ya que no hacen lo que enseñan. 4 Ya que atan cargas pesadas y las ponen en la espalda de otros, pero ellos mismos ni siquiera con un dedo las quieren mover. 5 Todo lo que hacen es para ser visto por otros, por eso ensanchan sus distintivos religiosos y alargan los adornos de sus mantos. 6 Prefieren los mejores lugares en los banquetes y los lugares de honor en las sinagogas. 7 Les gusta ser saludados con respeto en las plazas y ser llamados ‘maestros’. 8 Sin embargo, ustedes no permitan que los llamen ‘maestros’, porque uno es el Maestro de ustedes, y todos ustedes son hermanos. 9 Y aquí en la tierra no llamen ‘padre’ a nadie porque ustedes tienen un solo Padre, que está en los cielos. 10 Tampoco permitan que los llamen ‘líderes’ porque ustedes tienen un líder, el Mesías. 11 El más importante entre ustedes es el que sirve a los demás. 12 El que se engrandece será humillado, pero el que se humilla será engrandecido”.
1. Lectura
Jesús denuncia la incoherencia de los fariseos y maestros de la ley. Enseñan, pero lo que predican no va acorde con sus acciones. Buscan reconocimiento y apariencia y pero descuidan lo más importante y a los que nos invita Jesús: el servicio humilde.
Jesús, en cambio nos dice que todos somos hermanos y que Dios es nuestro padre y la verdadera grandeza es servir con humildad.
2. Meditación
El Evangelio me dice que la grandeza no se mide por títulos ni apariencias, sino por la humildad del servicio. Jesús me invita a dejar de lado la vanidad y a vivir como una hermana para mis hermanos, reconociendo que solo Dios es Padre y solo Cristo es Maestro. Quien se engrandece será humillado, pero quien sirve con sencillez será exaltado. Así mismo el verdadero discípulo no busca brillar ante los hombres, sino reflejar la luz de Cristo.
3. Contemplación
Me quedo contemplando esa verdad: el que se humilla será exaltado. Y dejo que esta palabra repose dentro de mí como una semilla de vida.
Así mismo, en silencio busco esa imagen de Jesús inclinándose para lavar los pies de sus discípulos, sin buscar honores ni reconocimientos. Su grandeza está en hacerse pequeño.
4. Oración
Señor Jesús, enséñame a vivir con coherencia y sencillez. Ayúdame a no buscar el aplauso de los demás, sino el gozo de hacer tu voluntad. Líbrame de la soberbia y dame un corazón humilde para servir a mis hermanos como tus me enseñaste.
5. Acción
Antes de nada mi accionar a partir de ahora será vivir con coherencia.
Yo me comprometo y los invito a hacernos pequeños hoy. Que hagamos un gesto de humildad por más pequeño que sea, escuchar, dar la mano, acompañar a alguien sin darnos a notar.