Lectio Divina
Sábado 21 de junio de 2025
Sábado XI Semana Tiempo Ordinario Ciclo C
P. José Manuel Reyes Cabrera de Rapública Dominicana ✍🏻🇩🇴
Invocación al Espíritu Santo
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles, y enciende en ellos el fuego sagrado de tu amor. Envía tu Espíritu Creador y renueva la faz de la tierra. Oh Dios, que has iluminado los corazones de tus hijos con la luz del Espíritu Santo; haznos dóciles a sus inspiraciones, ilumina nuestras mentes, voluntades y corazones, asístenos con tus dones en la misión. Por Cristo nuestro Señor. Amén..
Lectura del Santo Evangelio segun San Mateo 6, 24-34
24 Un esclavo no puede servir a dos amos al mismo tiempo, porque rechazará a uno y preferirá al otro, o será fiel a uno y despreciará al otro. No pueden servir a Dios y también servir al dinero.
25 Por eso les digo: “no se intranquilicen por la vida de ustedes: por la comida y la bebida que necesitan para vivir o la ropa que necesitan para vestirse. Después de todo, ¿la vida no es más importante que la comida y el cuerpo no es más importante que la ropa? 26 Miren las aves del cielo que no siembran, no cosechan, ni almacenan alimentos, y sin embargo, su Padre celestial las alimenta. ¿Acaso, no valen ustedes mucho más que los pájaros? 27 O ¿quién de ustedes puede alargar su vida, sin importar cuánto se preocupen por eso?
28 ¿Y por qué se preocupan por la ropa? Observen cómo crecen los lirios del campo: no trabajan ni hacen ropa para sí mismos. 29 Pero les digo que ni siquiera Salomón, que era tan rico, vestía ropas tan hermosas como estas flores.
30 Si la hierba del campo que hoy está y mañana se echa al horno, Dios la viste de esta manera, entonces, por supuesto, Él también hará mucho más por ustedes, que tienen tan poca fe. 31 Así que no se preocupen, preguntando: “¿Qué vamos a comer?” O “¿Qué vamos a beber?” O “¿Qué ropa vestiremos?” 32 Porque los paganos siempre buscan estas cosas. Su Padre en el cielo sabe que necesitan todas estas cosas. 33 Por tanto, busquen primero el reino de Dios y su justicia, y Él les dará todas estas cosas. 34 Así que no se preocupen por el día de mañana, porque mañana traerá sus propias preocupaciones. Cada día tiene sus propias dificultades”. Palabra de Señor…
Meditación
«Nadie puede estar al servicio de dos amos». Es una afirmación que también a nosotros nos pone ante la disyuntiva entre Dios y el dinero. Jesús nos enseña que no se puede servir a Dios y a las riquezas, instando a sus seguidores a buscar primero el Reino de Dios y confiar en que sus necesidades serán cubiertas. Este pasaje nos invita a reflexionar sobre nuestras prioridades y nuestra dependencia de Dios en la vida diaria.
Este pasaje nos llama a una conversión profunda de corazón, invitándonos a abandonar los agobios y preocupaciones y a abrazar la confianza en la providencia de Dios. Al buscar primero el Reino de Dios y vivir en la certeza de su amor, podemos experimentar la verdadera libertad y la paz que sobrepasa todo entendimiento.
Este pasaje nos desafía a examinar dónde ponemos nuestra confianza. Jesús nos recuerda que preocuparnos por las necesidades materiales es inútil y revela una falta de fe en la providencia de Dios. Debemos reflexionar sobre cómo nuestras acciones y decisiones reflejan nuestras prioridades. ¿Estamos buscando primero el Reino de Dios, o estamos más preocupados por acumular tesoros terrenales? ¿Confiamos verdaderamente en que Dios proveerá para nuestras necesidades, o estamos consumidos por la ansiedad, la preocupación y el miedo?
Oración
Señor, ayúdanos a confiar en tu providencia y a buscar primero tu Reino. Libéranos de la ansiedad y el miedo, y ayúdanos a poner nuestra confianza en ti. Danos la gracia de vivir cada día con la certeza de que tú cuidas de nosotros. Amén.
Contemplación
– No pueden servir a Dios y también servir al dinero.
– Su Padre en el cielo sabe que necesitan todas estas cosas.
– Busquen primero el reino de Dios y su justicia, y Él les dará todas estas cosas.
– Así que no se preocupen por el día de mañana, porque mañana traerá sus propias preocupaciones.
Acción
¿A qué me comprometo?
Areconocer y agradecer las bendiciones que Dios nos da cada día, dsprendernos de las posesiones materiales innecesarias, orar, confiar y servir.