Lectio Divina por Erinson De Jesús Bustamante De Venezuela
0. Invocación al Espíritu Santo
(Me doy unos segundos para respirar: inhalo, mantengo el aire, exhalo). En silencio recibo al Espíritu que es soplo, lo hago varias veces y digo pausadamente:
Ven, Espíritu de Jesús,
amoroso y tierno,
Que reconozca tu presencia
en todo, en todas y en todo.
Ven, Espíritu y abreme a una mirada distinta de tu presencia en mi vida.
(Me doy unos segundos para respirar: inhalo, tomo aire, exhalo)
Pedimos tu presencia por medio de aquella que escuchó tu palabra, la comprendió, la puso por obra y la dio al mundo: Dios te salve María…
Lectura del santo evangelio según san Lucas 11, 29-32
En aquel tiempo, la gente se apiñaba alrededor de Jesús,
y él se puso a decirles:
«Esta generación es una generación perversa. Pide un signo, pero no se le dará más signo que el signo de Jonás. Pues como Jonás fue un signo para los habitantes de Nínive, lo mismo será el Hijo del hombre para esta generación.
La reina del Sur se levantará en el juicio contra los hombres de esta generación y hará que los condenen, porque ella vino desde los confines de la tierra para escuchar la sabiduría de Salomón, y aquí hay uno que es más que Salomón.
Los hombres de Nínive se alzarán en el juicio contra esta generación y harán que la condenen; porque ellos se convirtieron con la proclamación de Jonás, y aquí hay uno que es más que Jonás».
Palabra del Señor
1. Lectura ¿Qué dice el texto?
¿Con quienes estaba Jesús?
¿Con quien los compara?
¿A que se refiere con una señal como la de Jonás?
¿Con quien se compara Jesús?
1. Jesús compara a la gente de su tiempo con la gente del pueblo de Ninive, quienes no supieron reconocer la invitación del profeta a un cambio de vida.
2. La señal de Jonás es una analogía de la resurrección, que solo será posible reconocer desde la mirada de Jesús.
3. Jesús es más que Salomón y que todos los profetas y reyes; pero aun así no lo reconocen. No se trata de que Dios condene, si no que no reconocer su acción y presencia ya supone una coneena de vida.
2. Meditación ¿Qué me dice el texto?
Me voy del siglo I al siglo XXI, de la sociedad e iglesia de ayer y me pregunto ¿Que me quiere decir Jesús hoy?
A. Hoy se me sigue invitando a cambiar ¿Reconozco aquello que como persona no marcha bien y estoy dispuesto a cambiarlo?
B. Jesús nos da muestras permanentes de Resurrección ¿lo reconozco Resucitado en mi vida y en la vida de mi pueblo y país?
C. Jesús es Hijo y Hermano de todos y todas ¿reconozco su presencia en mi vida?
3. Oración ¿Qué respondo al Padre?
Te invito a reconocer a Jesús en tu vida.
[ ] Pido perdón por las veces que no he reconocido mis propios errores y sigo actuando igual.
[ ] Agradezco por su presencia en mi vida; porque todo, todos y todas son un signo de su estar entre nosotros.
[ ] Pido por mis hermanos y hermanas que hoy sufren la ausencia de Dios en sus vidas
(Ponemos nuestras vidas, relaciones, trabajos, países)
4. Contemplación ¿Qué resuena en mi vida?
Aquí hay uno que es más que Jonás.
A ti, ¿qué frase, palabra o expresión te resuena más?
5. Acción ¿A qué me comprometo a partir de esta Palabra?
Reconocer la presencia de Dios en cada ser vivo, acontecimiento y espacio durante este día.
Asumir con humildad los propios errores y hacer propósitos claros de cambio.
Pedimos al Padre que se haga Su voluntad de vivir en compasión. Por eso junto a Jesús decimos: Padre Nuestro…
Saludos desde Venezuela y un abrazo a cada uno/a hermanos y hermanas.